Se trata de Surachate Hakparn, uno de los policías más conocidos de Tailandia que se suele encargar de resolver algunas de las investigaciones más complicadas con presos que proceden del extranjero del país.
El caso de Daniel Sancho continúa dando pasos hacia delante. El hijo del conocido actor español Rodolfo Sancho se ha convertido en noticia en todo el mundo después de confesar el asesinato de un cirujano colombiano con el que había mantenido encuentros sexuales después de haberlo descuartizado hace ya unos días.
La situación de Sancho, hijo de Rodolfo y de la también actriz Silvia Bronchalo, ha trascendido las fronteras españolas, ya que el crimen se ha producido en Tailandia, donde se encuentra detenido a la espera de conocer qué sucederá con su destino. Mientras tanto, tanto él, como su familia como la de su víctima, Edwin Arrieta, se han convertido en el centro de todas las miradas internacionales.
Conscientes de la enorme exposición mediática, Tailandia se ha tomado muy en serio el caso y ha movilizado una enorme cantidad de expertos, disponiendo de sus mejores operativos, para ofrecer la mayor imagen de solvencia y profesionalidad posible al mundo. Al frente de todos los equipos desplegados se encuentra uno de los mejores investigadores del país y experto en casos relacionados con criminales extranjeros. Se trata de Surachate Hakparn, más conocido como ‘Big Joke’, un personaje al que ahora conocemos en profundidad.
¿Quién es ‘Big Joke’, el policía al frente del caso de Daniel Sancho?
‘Big Joke’, cuyo nombre real es Surachate Hakparn, es un conocido agente tailandés que cuenta con una enorme reputación en su país. A sus espaldas tiene la resolución de algunos de los casos más complicados de los últimos años en Tailandia. Por ello, en cuanto las autoridades supieron la magnitud que tendría el caso de Daniel Sancho, concordaron que era la persona adecuada para ponerse al frente del mismo.
Surachate Hakparn aterrizó en la investigación prácticamente en su comienzo, justo cuando se encontraron los primeros restos de Edwin Arrieta. Estos aparecieron en varias bolsas repartidos en diferentes puntos de la isla de Koh Panghan. Sectores muy importantes del país confiaron en sus altas capacidades y le encomendaron resolver el caso y asegurarse de que, en caso de que Daniel Sancho fuera declarado como culpable, hacer que todo el peso de la ley cayera sobre su figura.
Antes incluso de que se hiciera oficial su llegada a la investigación, cuando la opinión popular conoció la gravedad de los hechos que estaban trascendiendo, muchas personas pensaron directamente en la figura de Surachate Hakparn, a quien popularmente se le conoce como ‘Big Joke’. Este mote procede por su habitual sonrisa, esa que normalmente le acompaña en casi todas sus apariciones públicas.
El poder mediático que ha obtenido este policía en los últimos años procede de su talento para resolver casos complicados, casi siempre escabrosos, y que están relacionados con criminales extranjeros. Circunstancias que podrían estar todas presentes en el caso de Daniel Sancho.
Todos los expertos y analistas concuerdan en que su mayor habilidad es saber mantener la calma en los momentos más complicados y su destreza especial para manejar situaciones límite bajo la presión de las más altas esferas. Ahora, con los ojos de Tailandia, España y más de medio mundo sobre sus hombros, espera volver a tener éxito.
¿Qué casos han marcado la carrera de ‘Big Joke’?
La carrera de Surachate Hakparn, o ‘Big Joke’ como se le conoce en su país, dio un giro radical en el año 2019, cuando se ocupó de un caso muy particular. Fue la llegada a Tailandia de Rahaf Mohammed al-Qunun, una joven procedente de Arabia Saudí que huía de Kuwait por el maltrato al que le estaba sometiendo su propia familia. Esta situación provocó un gran conflicto internacional.
En ese momento, Surachate Hakparn era jefe de inmigración de la Royal Tahu Police y fue presionado de manera muy importante por un estado tan peligroso como el saudí, quienes exigían la detención de la joven. Él se negó rotundamente y consiguió que la joven terminara encontrando asilo en Canadá.
Su carrera ha estado marcada por grandes éxitos, pero también por algunas crisis importantes y por su enfrentamiento con algunos personajes importantes de la política del país. Uno de los escándalos más sonados que ha protagonizado estuvo relacionado con el caso de una joven británica que se vio envuelta en un conflicto internacional.
Ella aseguró haber sido violada. Sin embargo, tal y como informaron en su momento medios locales, Surachate Hakparn no se creyó del todo su versión y la presionó hasta amenazarla de que si mentía en su testimonio nunca podría volver a su país. El caso nunca llegó a quedar claro del todo y ciertas informaciones aseguran que todo se debió a la intervención del primer ministro del país. En ese momento, Surachate Hakparn ocupaba un puesto en la oficina del dirigente tailandés.
Tras esta investigación, ‘Big Joke’ fue relegado de sus funciones, pero muchos sectores piensan que su destino quedó marcado por su enfrentamiento con Prayut Chan-o-cha. Surachate Hakparn hizo unas declaraciones públicas en las que criticó la eficiencia de un sistema de identificación biométrica por el que el gobierno de este general había gastado más de 65 millones de dólares. Unas palabras que Chan-o-cha no parecía estar dispuesto a pasar por alto.
Aquel desplante estuvo a punto de costarle la vida e incluso le llevó a tener que abandonar el país. Meses después del altercado, su coche fue tiroteado por unos individuos que se acercaron y huyeron en una moto. A pesar de sus intentos, nunca consiguió que estos fueran identificados. ‘Big Joke’ no sufrió daños, pero sí sintió como el miedo más profundo se instaló en su cuerpo.
Huida del país y consagración como monje budista
La situación se hizo insostenible para él y para su familia. Por ello, decidieron hacer las maletas y mudarse a la India, donde allí buscó una nueva vida y, sobre todo, la paz perdida. Después de mucho trabajo de búsqueda, se ordenó como monje budista y pasó a tener ese nuevo camino que tanto había anhelado en su etapa más difícil en su país natal.
Sin embargo, no solo encontró paz en esta nueva deriva, sino también fuerza para regresar a Tailandia y retomar su carrera como policía y como investigador. Poco a poco, a base de éxitos, fue recuperando el estatus perdido hasta volver a consolidarse como un héroe para su pueblo. Su salto definitivo llegó cuando consiguió detener a un violador que había abusado de manera salvaje de una mujer en su propia casa en una de las zonas más lujosas de Bangkok.
Ahora, superadas ya las malas épocas, su nombre vuelve a gozar de una reputación intachable en Tailandia a todos los niveles. Por ello, desde el primer momento fue reclamado como la persona idónea para resolver el caso del crimen supuestamente cometido por Daniel Sancho, en el cual tendrá que hallar todas las respuestas que construyen una historia enrevesada y realmente macabra.
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