Ubicada en Santa Fe, la empresa llamada Tinka generó un fuerte revuelo al agotar la primera tirada de las bolitas de los campeones del mundo; la dueña, Mariana Chiarlo.
Una fábrica de bolitas de Santa Fe le rindió homenaje a La Scaloneta a un año de la obtención del Mundial.
on trabajo, disciplina y resultados, la selección argentina se consagró hace un año en el Mundial de Qatar. En una fórmula que posiblemente se pueda trasladar a otros ámbitos de la vida cotidiana, la fábrica de bolitas llamada Tinka, ubicada en San Jorge, un pueblo de Santa Fe, se sostuvo de esos pilares para festejar sus 70 años de vida con un homenaje al plantel comandado por Lionel Scaloni.
En un trabajo minucioso que contó con la ayuda de empleados, dueños y hasta familiares de las personas involucradas, la fábrica logró crear un total de 250 mil bolones con la cara de los 26 jugadores que participaron del Mundial, el director técnico y tres menciones icónicas: la Copa del Mundo, las tres estrellas y Lionel Messi besando el trofeo dorado otorgado por la FIFA.
Una de las dueñas de esta fábrica es Mariana Chiarlo, quien, en diálogo con LA NACION, afirmó que la primera tirada está agotada, y contó cómo es el trabajo manual de insertar la imagen de cada jugador en los bolones, más las vicisitudes económicas que debe afrontar con el aumento intempestivo del dólar.
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“Hoy podemos decir que está agotada la primera edición y nos encaminamos a una segunda con la dificultad de que todos nuestros elementos son importados y a precio dólar. Todo nos va a costar el doble, pero vamos a seguir hasta el final”, explicó Mariana desde el pueblo llamado San Jorge, que tiene 25 mil habitantes y una fábrica única en su rubro en el país.
En esa misma línea continuó sobre el proceso de fabricación: “La primera tirada contó con 250 mil bolones con sus respectivos stickers, lo que en total significan una cantidad de 3000 cajas que se agotaron por completo al ser distribuidas por todo el país. Estos stickers no están dentro de los bolones, sino que por fuera, hay un trabajo artesanal de pegar uno por uno. Una vez terminada esa faceta se lleva a una mufla (horno especializado) donde se vitrifica y se llega al resultado final”, explicó.
Los 26 jugadores que inspiraron a la personalización de cada bolita.
A la hora de su distribución, Mariana contó que cada bolsita contiene 12 bolitas de color celeste y blanco y tres bolones personalizados. “Para armar la colección de 30 tenés que comprar varias bolsitas. La idea nuestra es que sea un boom parecido al de las figuritas donde los chicos puedan intercambiarlas en las colonias de verano o en los recreos del colegio”, soltó.
Con Lionel Messi como la figura preponderante del equipo, Mariana le bajó un poco la efusividad al furor por el rosarino y remarcó que cada integrante del equipo fue importante a la hora de homenajearlos: “Los campeones del mundo fueron todos. Nuestro homenaje es con respeto a la humildad y el trabajo de cada uno de ellos”, puntualizó.
“El bolón de Messi cotiza como cualquier otro, uno tiene en cuenta que para llegar a donde llegamos se necesitó de un equipo, hay que entender ese concepto. Todos aportaron en la misma proporción”, reflejó Chiarlo para descartar cualquier chance de poner sobre un pedestal a alguno de los futbolistas que fue parte de la conquista en Medio Oriente.
A días de organizar una nueva tirada para abastecer a un público que mantiene el deseo de tener las canicas de sus ídolos, Mariana descartó, hasta el momento, algún contacto desde la Asociación del Fútbol Argentino: “Nadie se contactó. Sabemos que son personas ocupadas, valiosas, importantes y nosotros somos una industria pequeña, que no queremos molestar a nadie, ni tampoco pretendemos que se contacten. Si se da el contacto, sería una alegría enorme para los chicos que están trabajando en este proyecto”, indicó la dueña de una empresa familiar que desarrolló una logística especial para poder enviar a cada punto del país este invento que tomará carácter de coleccionable con el tiempo.
Como parte de un mecanismo que impera en diferentes estamentos de la sociedad, tanto los equipos de fútbol como las empresas atraviesan procesos que pueden ser dificultosos de acuerdo al contexto del país. “La empresa tuvo épocas buenas y otras más complicadas donde cerramos unos meses. Acá con mucha esfuerzo y trabajo se buscó levantar la fábrica y hoy por suerte nos está resultando”, cerró Mariana quien conoce del sacrificio para lograr éxitos, como así lo hizo la selección argentina para afrontar diferentes procesos hasta lograr su tercera estrella en el escudo.
Federico Marín
Fuente: https://www.lanacion.com.ar/deportes/a-un-ano-del-mundial-de-qatar-2022-una-fabrica-de-bolitas-armo-una-edicion-especial-con-la-scaloneta-nid18122023/
