La empresaria optó por un corpiño confeccionado con mechones oscuros, acompañado por una falda translúcida y detalles metálicos

La empresaria Kim Kardashian volvió a captar la atención internacional en su cumpleaños número 45, celebrado en Londres con una fiesta privada cuyo código de vestimenta giró en torno a la lencería. La empresaria llevaba puesto un corpiño confeccionado con mechones oscuros que imitan cabello humano, firmado por la diseñadora Dilara Findikoglu.
Por otro lado, sus prendas tenían Cadenas plateadas y aplicaciones metálicas que recorrían el torso y sus hombros. Esto otorgó al conjunto una impronta sofisticada y casi escultural. El estilismo se completó con una pollera transparente sobre un short negro de tiro alto y medias translúcidas para reforzar el juego entre provocación y elegancia.
Días atrás, la ciudad de Los Ángeles reunió a exponentes de la cultura y la moda durante la gala del Academy Museum. Allí, Kim Kardashian fue una de las figuras destacadas desde el inicio del evento, captando la atención tanto del público como de la prensa al lucir un vestido de Maison Margiela, diseño a cargo de Glenn Martens para la colección de Alta Costura otoño-invierno 2025/26.
La pieza, fiel al estilo vanguardista de la firma, presentaba un corsé strapless de silueta ajustada, complementado por mangas largas que caían formando una capa, lo que aportó un efecto dramático. El elemento más distintivo del atuendo fue la cobertura integral del rostro mediante una tela a tono con el vestido, sin aberturas aparentes, creando así una imagen enigmática gracias al velo semitransparente que envolvía cabeza y cuello.
