La interna de cada coalición dejó heridos: Kicillof logró imponer nombres clave, el PRO quedó debilitado y Milei arrasó con su dedo vertical.
El armado de las listas para las elecciones bonaerenses dejó muchas lecturas y tendrá consecuencias para la dinámica interna de cada una de las coaliciones y para la definición de las candidaturas nacionales de cara a octubre. Cada espacio procurará presentarse en los próximos días como habiendo obtenido lo que pretendían en las negociaciones.
Por el lado del oficialismo provincial, luego de que se expusieran abiertamente las diferencias entre los distintos sectores, se lograron acuerdos muy forzados. Una primera lectura coloca en mejor posición al gobernador Axel Kicillof porque logró que Verónica Magario encabece la lista en la tercera sección que es en la que el peronismo tiene más chances de ganar. En ese caso, la vicegobernadora sería la gran triunfadora del espacio oficialista en la provincia. Kicillof también logró que Gabriel Katopodis sea el primer candidato a diputado en la primera sección que será la que concentrará la atención.
En la interna de LLA se impuso claramente la estrategia de Karina Milei que logró colocar a todos sus candidatos. Pero aplicó criterios diferentes porque en la primera sección respaldó a Diego Valenzuela, una figura reconocida que está al frente de la intendencia de Tres de Febrero para encabezar la lista. Pero en la tercera, LLA se manejó de manera distinta postulando en primer término al excomisario Maximiliano Bondarenko sin una actuación política destacada.
El PRO quedó debilitado porque varios de sus intendentes más destacados lo abandonaron disconformes con el acuerdo con los libertarios. En a lista están los jefes comunales de San Nicolás, Junín, Pergamino y Nueve de Julio.
Eso debilita a ese partido para la negociación que debe hacerse en agosto para la confección de las listas de diputados nacionales que competirán en octubre. Al PRO se le hará más difícil reclamar ahora la misma cantidad de candidaturas que antes del cierre de las listas provinciales, porque su peso electoral disminuyó.
- Cristian Ritondo, en las negociaciones con LLA, había afirmado que todos los intendentes del PRO respaldaban su estrategia, lo que finalmente no fue cierto.
En el marco de Somos Buenos Aires, la UCR logró encabezar las listas en cuatro secciones, pero con pocas posibilidades de obtener bancas. Pero la mayor chance la tiene en la cuarta sección porque lleva a la segunda candidata detrás del intendente de Junín, Pablo Petrecca.
Algunas conclusiones
El saldo de todo el proceso de confección de las listas es negativo porque mostró una elevada conflictividad interna sin que estuviese fundamentada, en la mayoría de los casos, en visiones políticas.
Una novedad la constituyó la conformación del espacio Somos Buenos Aires que pretende ocupar un lugar de centro en un contexto altamente polarizado. Ese espacio puede tener un nuevo capítulo en octubre y apuntar a 2027.
Otra novedad es el desdoblamiento electoral: si bien no llevará a que la campaña se concentre en la agenda provincial porque la elección está nacionalizada, sí le dará mucha centralidad política por lo que cada espacio decidió competir con muchas figuras de peso.
La primera sección será el centro de atención. Es ahora la más poblada. Se presenta como muy reñida y con un resultado incierto. Además, allí encabezarán las listas dos intendentes representativos: Valenzuela y Julio Zamora y el exintendente de San Martín y actual ministro Gabriel Katopodis.
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