A seis meses del doble crimen en Florencio Varela, los juristas mantienen diferencias por las hipótesis que barajan para pedir justicia por los adolescentes brutalmente asesinados.

Josué Salvatierra y Paloma Gallardo.
Aníbal Osorio, abogado de la madre de la adolescente asesinada Paloma Gallardo, sostuvo que la defensa de la familia de Josué Salvatierra, la otra víctima del doble crimen ocurrido a principios de febrero, mantiene la intención de «llevar la investigación para el lado religioso».
En diálogo con la agencia Noticias Argentinas, el letrado habló de las diferencias que mantiene con su par Carlos Diéguez, asegurando que “no se pone de acuerdo en un trabajo conjunto”.
«Las dos partes sostenemos diferentes teorías», dijo Osorio, asegurando que su semejante «quiere llevar la investigación para el lado de la religión». El abogado de Alicia Pita, mamá de la adolescente de 16 años, cree que los jóvenes «fueron víctimas de un hecho de inseguridad».

Según Osorio, Diéguez solicitó un allanamiento en un galpón cercano donde encontraron los restos de Paloma y Josué, ya que allí funcionaba la sede de una congregación religiosa conocida como “Familias Sanas”.
El procedimiento consistió en detectar «manchas de sangre en objetos y los celulares de los dos chicos», pero no se encontró ninguno de los elementos buscados. «Las huellas del territorio hablan y no pueden ser ignoradas», añadió.
Por esta razón, Osorio consideró que los autores del doble crimen de los jóvenes «no llegaron por azar», sino que «frecuentaban y conocían la zona», ya sea «por adicción, situación de calle, actividades ilícitas o incluso conocimiento previo de los damnificados».
Detalles del crimen
Paloma Gallardo (16) y Josué Salvatierra (14) fueron asesinados el 30 de enero en la localidad bonaerense de Florencio Varela, precisamente en un descampado cerca de un puente ferroviario en la localidad de Bosques. Los cuerpos fueron encontrados el 2 de febrero.
Según las autopsias, ambos adolescentes compañeros de la Escuela Secundaria N°63 presentaban fracturas de cráneo y traumatismos encefalocraneales graves, que determinaron que Paloma murió por una «lesión cerebral» y Josué por una «hemorragia cerebral».
Sus pertenencias, como celulares, una mochila y una tarjeta SUBE, fueron robadas, lo que inicialmente llevó a la hipótesis de un robo seguido de homicidio.
Hasta el momento el caso tiene un solo sospechoso. Se trata de un hombre de 36 detenido en General Roca, Río Negro, luego de detectarse que tenía un celular con el mismo IMEI que el de Josué.
Sin embargo, su declaración presentó fragilidad, y aunque afirmó haber comprado el teléfono en Marketplace, no pudo explicar ciertas llamadas. Los peritos determinaron que su celular era el original, mientras que el de Josué tenía un IMEI clonado. El sospechoso continúa detenido, aunque hasta el momento no hay pruebas concretas que lo vinculen directamente con el crimen.

https://www.cronica.com.ar/policiales/Doble-crimen-de-Josue-y-Paloma-impensada-pelea-entre-los-abogados-de-las-familias-de-las-victimas-20250706-0018.html
